Diseñar un modelo de calidad de cuidados para la seguridad del paciente en los hospitales es uno de los grandes retos de la medicina actual. Y es que el entorno hospitalario es el lugar que exige, por parte de las plantillas médicas, un mayor esfuerzo de coordinación entre todos los profesionales de la salud para conseguir un óptimo cuidado.
A lo largo de este artículo examinamos cuáles son los aspectos más importantes a tener en cuenta para el cuidado del paciente en hospitales y qué tipo de cuidados hospitalarios son los más frecuentes. Como veremos, la formación interdisciplinar de los profesionales de la salud es un aspecto fundamental para la creación de estos modelos asistenciales de calidad.
Qué aspectos tener en cuenta para el cuidado del paciente en hospitales
- Atención personalizada: en cada consulta debemos considerar sus necesidades específicas, su historial médico y, por qué no, sus preferencias personales.
- Seguridad del paciente: los protocolos estrictos de actuación ayudan a evitar errores médicos, infecciones nosocomiales e incidencias de todo tipo. Todo el personal de plantilla debe seguir, por tanto, una estricta higiene, emplear adecuadamente los equipos de protección y realizar una verificación doble de medicamentos y dosis cada vez que vayan a ser administrados.
- Comunicación empática entre el personal médico y los pacientes. La política de puertas abiertas para preguntas y preocupaciones ayuda a mejorar el diálogo con los pacientes y sus acompañantes. Además, todas las explicaciones sobre diagnósticos y tratamientos deben darse con claridad y empatía.
- Educación para la salud: proporcionar a los pacientes y sus familias la información y herramientas necesarias para entender su condición y cuidados post-hospitalización es crucial para su recuperación y para prevenir reingresos.
- Cuidado interdisciplinario: velar por la salud de un paciente es siempre un esfuerzo colaborativo que involucra a médicos, enfermeras, especialistas, trabajadores sociales y todos los profesionales de la salud que deben trabajar de manera coordinada.
- Manejo del dolor: el uso de escalas de dolor y la implementación combinada de terapias farmacológicas y no farmacológicas son fundamentales para el confort del paciente.
Qué tipos de cuidados al paciente se realizan en hospitales
De la misma manera que los tipos de afecciones pueden ser muy diversos, el conjunto de cuidados médicos que se proporcionan en entornos hospitalarios también lo son. Explicaremos por tanto algunos de los más comunes o cuyas áreas de actuación resultan más críticas para la salud de los pacientes:
- Monitoreo constante de pacientes críticos en la unidad de cuidados intensivos (UCI) con el empleo, por ejemplo, de ventiladores mecánicos para pacientes con insuficiencia respiratoria aguda.
- Cuidados oncológicos para enfermos de cáncer, como la quimioterapia, que demanda un seguimiento detallado de los efectos secundarios y la administración de medicamentos de soporte.
- Monitorización de electrocardiogramas y administración de fármacos cardiotónicos para aquellos pacientes que sufren cardiopatías. Además, el personal sanitario que administra este tipo de cuidados debe estar entrenado en reanimación cardiopulmonar avanzada y en el uso de desfibriladores automáticos.
- Cuidados neonatales tanto para prematuros como para aquellos bebés con condiciones médicas que requieren cuidados adicionales. Los equipos médicos a cargo asumen el manejo de incubadoras, el monitoreo de signos vitales o administración de nutrición parenteral.
- Los cuidados paliativos -aquellos que se centran en mejorar la calidad de vida de los enfermos terminales- también tienen cabida en el cuidado hospitalario. Un ejemplo específico que puede resultar convenientemente ilustrativo es la gestión del dolor mediante bombas de infusión de analgésicos y la atención psicológica para el paciente y su familia.
La importancia de la formación sanitaria interdisciplinar
Observando la gran variedad de actuaciones que tienen lugar en el entorno hospitalario comprendemos mejor por qué todo profesional de la salud debe contar con una formación verdaderamente transversal, que le permita dar respuesta a la amplia necesidad de cuidados hospitalarios que puede encontrar en este contexto.
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